Sin dejarse acomplejar por su cojera ni por su joroba, el príncipe Riquete le pide a una hermosa princesa que se case con él. ¿Logrará Riquete ser correspondido?En este cuento clásico de Perrault, los buenos sentimientos se alían con los diálogos más ocurrentes para darnos a entender que el corazón ve mejor que los ojos y el poder del amor no tiene límites.